Lo avisaba Xavi este pasado miércoles durante su conferencia de prensa. «En Alemania han dicho ellos que es el partido más importante de su historia. Para nosotros también. A mí también me sorprendió el ambiente. Nunca había estado en ese campo. Muy agresivo, hostil con nosotros. Intentaremos igualarlo», explicaba el entrenador y se ha demostrado con la invasión de 35.000 aficionados alemanes que se han desplazado a Barcelona para animar al Eintracht. Los seguidores teutones sueñan con el pase a semifinales y se han movilizado en un desplazamiento sin precedentes para un partido que no es una final, sobre todo teniendo en cuenta que sólo 5.000 de ellos tienen entradas. Pero la afición alemana quiere estar en una cita que consideran histórica y ya están tiñendo la Ciudad Condal con los colores de su equipos. No obstante, no se prevén altercados, ya que no es una afición peligrosa ni violenta.
Hay que destacar que los vuelos entre Fráncfort y Barcelona se agotaron hace varios días, igual que los que hacen escala en Dusseldorf, Múnich y Stuttgart. Una de las preocupaciones en el Barça es que muchos aficionados del Eintracht hayan conseguido la entrada por su cuenta y aumenten esa cifra de 5.000 seguidores previstos en las gradas del Camp Nou. Esta cantidad es el cupo obligatorio que la UEFA ha determinado que el club catalán debía ceder al Eintracht.
En Barcelona ya se respira el ambiente de partido y esta mañana se ha vivido una escena curiosa cuando en el último cuarto de hora del partido que disputaba el Europa ante el Huesca B (jornada 26 del grupo 3 de la Segunda División RFEF), unos 200 seguidores alemanes, aprovechando la entrada gratuita en ese momento del encuentro, entraron en el Nou Sardenya, se mezclaron con los hinchas locales y animaron con fuerza y fervor al Europa, que iba perdiendo 0-3, en un ambiente amigable y de total cordialidad. Hay que recordar que el Europa, club muy concienciado con las causas sociales, ha sido la primera entidad futbolística española en declararse antimachista, antirracista, antifascista, antihomófobo y antibullying.
Este artículo ha sido publicado originalmente en este sitio.
